Inteligencia Emocional
¿Qué es la Inteligencia Emocional?
La Inteligencia Emocional la que nos ayuda a entender de qué manera podemos influir de un modo adaptativo e inteligente tanto sobre nuestras emociones como en nuestra interpretación de los estados emocionales de los demás. Este aspecto de la dimensión psicológica humana tiene un papel fundamental tanto en nuestra manera de socializar como en las estrategias de adaptación al medio que seguimos.
¿Por qué es importante desarrollarla?
Muchos investigadores creen que las habilidades emocionales deberían tener un alto grado de importancia en la enseñanza, al igual que las matemáticas, la lectura, la historia y la ciencia. De hecho, la investigación ha descubierto que a las personas que desarrollan la educación emocional les va mejor en la escuela, tienen mejores relaciones y tienen menos comportamientos poco saludables.
Además, hoy en día se buscan las llamadas habilidades sociales (social skills) – que incluyen persistencia, manejo del estrés y comunicación – en el mundo del trabajo, a medida que los empleos se mecanizan.
Al desarrollar la inteligencia emocional de nuestros hijos, les damos los recursos para que puedan gestionar sus emociones de un modo adecuado y de este modo puedan experimentarlas, sin reprimirlas, reconocerlas y dejarlas pasar y cumplir su función. Se trata de controlarlas antes de que nos controlen.
El desarrollo de la inteligencia emocional se debe inculcar desde un primer momento, en los niños. La importancia de la educación emocional es indiscutible, ya que les proporcionará los recursos emocionales para una gestión emocional que garantice su bienestar.
Tips para DESARROLLAR LA educación emocional EN NUESTROS HIJOS
Preocúpate de crear un clima positivo, para crear un ambiente donde los pequeños se sientan cómodos para poder ser, para poder pensar y para poder sentir.
No suprimas sus estados emocionales, sentir es natural y es sano.
Ayúdales a identificar y reconocer sus emociones y las de los demás.
Desarrolla en ellos la reflexión, meditar y ordenar los pensamientos, les ayudará a dirigir su emoción.
Enséñales formas positivas de expresión emocional: el deporte, el arte, dibujo, la música, el dialogo, etc…
Sírveles de ejemplo. Los niños aprenderán tus reacciones emocionales de observarlas diariamente.
Muéstreles la importancia de saber gestionar las emociones. Una gestión adecuada no quiere decir suprimirlas, sino ser capaz de controlarlas antes de que nos controlen.
Enséñales a sentir sin miedo. Hazles saber que todas las emociones forman parte de nosotros y tienen una función, que lo importante es dejarlas fluir y no reprimirlas.
Enséñales cómo se llaman, cómo son y en qué se diferencian las diferentes emociones, sentimientos y sensaciones.